La piel del cocodrilo sí está cubierta de escamas, siendo una de las características más sobresalientes de dicho animal.
Las escamas del cocodrilo están compuestas por queratina, una proteína que en otros animales es el constituyente principal de las uñas, plumas, cuernos y otras partes del cuerpo similares.
Dichas escamas no se encuentran solapadas entre sí, y debajo de ellas se encuentran los osteodermos, que son unas pequeñas placas compuestas de hueso. Estas placas sí se encuentran solapadas, y se esparcen por todo el cuerpo del reptil en cuestión, convirtiéndose en una importante y fuerte defensa para el animal, como si de una armadura se tratase.
Mi abuelo creía que los crocodilos no tenían escamas
Es bonito pero mortal.